sábado, 17 de diciembre de 2011

Borocoto borocoto chas chas


Lo que me gusta la ciudad de Buenos Aires; la recorrería entera con vos, y esa belleza que te acompaña, aventurera e infantil, por las cornisas del barrio. Sin predecir finales mi icónico ojo fotográfico y la impronta mirada del instinto, del paseo, de una nueva visión llega hasta mi; me insita a salir, a descubrirme esplendido... Lindas las gotas y la indiscreción de las palomas, lindo elegir la imagen para no hablar en palabras, los mimos con misterio y la luna que nos resguarda desnudos en el sucio baile.

jueves, 6 de octubre de 2011




Todo el amor sin fronteras en el aire. Sugerir ideas sobre gustos en tu cabeza y en tu pelo es, y como con efecto, hace que hoy el sol se ponga al mediodía. Todo lo cambia el rumbo, que suele caer en dirección sur sobre tus pies, ese soy yo. Y con eso somos destapados en la imagen, volcánicos y acrobáticos, con solo atreverse a los besos más sanos, sabemos que protegen el bosque y la calma tropical del pantanal. El calor compagina mis deseos y suenan las primeras chicharras, pegoteando sus alas, desplazándonos, surcando el río como reptiles atravesados de sabores. Empapados en besos, llamados por los colores del cause de los ríos, de cada partícula en primavera ascendiente, sin miedos; somos el caudal, el lecho y el sedimento. Donde sugestiona el amor, lo imaginable, suena real. El sentido se expresa único, circular, e indiscutible. Comer insectos cremosos, con el capcioso y amistoso perfume natural a la hora de cenar. Tras el suspiro, la proyección de trepar a los árboles más altos. Animarse, y subirse a la copa ajustando el olfato, bajo cielos derramados en lunas alteradas, y el eco latente del roce vegetal.

miércoles, 10 de agosto de 2011


Encargado de contar lo mas importante en la vida. Así sería, un rayo de luz si fuera de conocimiento publico. Leyenda de noticias, la enseñanza pura y placentera de un cuento condensando en el final. Filosofía natural y milenaria. El amor.

Rojo contra la envidia y rojo para la suerte a puertas cerradas. El sol encandila las lilas, y nos obliga a caminar de la mano repetidas veces hasta lograr imposible mirarlas una por una. Intermitentemente se abre el césped, al igual que mis ojos, embiste a la distancia un viento estático en la penumbra de lo extraño.

Invencibles elecciones dieron lugar y, dejaron pasar el tempestuoso temperamento bestial, creando de nosotros añicos, sinvergüenzas iluminados, agresivos inflamables; individuos paranormales silbando en los restos de la hoguera. Varios de ellos crecieron dentro de mí, desmitificaron la piel, y quien soy. Siendo galardonados de fieros sentimientos, raspando en los durmientes lo metálico de la sensación que vamos mutando la industria del amor.

La fama en forma de maremotos y manchas apresuradas sin criterio hizo que el frió enamorara al más suelto. La nieve íntima, sorprende al conocernos sin más que palabras. Ves la fauna jugando ante la delicia de apicultor. Leo mis palabras escritas en baba, coordinando la mirada al ras del suelo, descifro el sitio del limbo. Salto a enfrentar nuestros torsos de primera, ahogarnos en la oferta del perfume frutal, y la costumbre de yuxtaponernos medicados de sentimientos melodramáticos. Suena el gong al momento de la pelea. El tiempo hipnotizó al diablo, es el comienzo de la euforia. Decapitando el resultado, abre su pubis al sueño recurrente. Siete velas, hormigas en miel de abejas, para que reine la calma en el panal.

miércoles, 15 de junio de 2011


Brutalidad estilizada. Hoy calificamos con la imaginación. La razón sobresaliente al margen. La rítmica libre noctámbula.
Mientras más colores ven mis ojos en el vaso, más tempestuoso se vuelve mi deseo. Me quedo con tu preferido. Resalto tu favorito.
Artemisa, sangre fría, tímida proporcional, frutal y misericordiosa. Protagonista cosmogónica de la fe y la creencia en lo sobrenatural, lo real y el instante afortunado, en que nos conocimos, distanciamos; y resaltamos la devoción del fin en una infusión.
Traspaso con el vamos, hasta a lo que sabe tu paladar, me robaste esas deliciosas vitaminas ricas en minerales, que se pegan a mis paredes y a mis libros. Te quedaste con mi Himalaya, con mi deseo de Kilimanjaro.
Los besos, realzados de sabor. Tus caricias que alimentan mi piel de ilusiones, todo tu componente activo reacciona. Pardo-oscura se vuelve mi mente y lucha con telepatía por tu sonrisa. Para que las propiedades se vuelvan tuyas una vez mas, metabolizaré a tu gusto, fluiré sin parpadeos con estas ganas tiburónicas de morderte.

lunes, 21 de febrero de 2011

jueves, 13 de enero de 2011


Soy el volumen de la música que mas te gusta. Mi forma de quererte es creer en tu sonrisa, y tú en textos, donde caben cosas de cuando no tenías ni veinte.
Siempre me van a tener que salir bien las mentiras, como forma de llevar a cabo logros catastróficos.
La vista es aeróbica y desorbita al arco iris más ilusorio, proyectando la avenida pintada por el atardecer de oro, Lo demás, de bronce. Tan tosco y brillante plumaje que te confundirías al momento de probar la vista, todo sabe a belleza clandestina.
Siempre siento igual, que cuando vuele detenga el tiempo, pausadamente, lo parecido tiende a permitírsenos.
Es bueno que traigas buenas ideas a la mesa y que innoves con tus trucos, y planes imbatibles. Rapiñaste hasta el más mínimo detalle de lo que estaba haciendo y a mis preocupaciones las acariciaste. Teniendo esto tan bonito, tendrás algo, tendré penas.