miércoles, 15 de junio de 2011


Brutalidad estilizada. Hoy calificamos con la imaginación. La razón sobresaliente al margen. La rítmica libre noctámbula.
Mientras más colores ven mis ojos en el vaso, más tempestuoso se vuelve mi deseo. Me quedo con tu preferido. Resalto tu favorito.
Artemisa, sangre fría, tímida proporcional, frutal y misericordiosa. Protagonista cosmogónica de la fe y la creencia en lo sobrenatural, lo real y el instante afortunado, en que nos conocimos, distanciamos; y resaltamos la devoción del fin en una infusión.
Traspaso con el vamos, hasta a lo que sabe tu paladar, me robaste esas deliciosas vitaminas ricas en minerales, que se pegan a mis paredes y a mis libros. Te quedaste con mi Himalaya, con mi deseo de Kilimanjaro.
Los besos, realzados de sabor. Tus caricias que alimentan mi piel de ilusiones, todo tu componente activo reacciona. Pardo-oscura se vuelve mi mente y lucha con telepatía por tu sonrisa. Para que las propiedades se vuelvan tuyas una vez mas, metabolizaré a tu gusto, fluiré sin parpadeos con estas ganas tiburónicas de morderte.